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Según estudio , portátiles, Laptop que recalientan dañan la piel y podrían causar cáncer
Muchas personas aman su computador portátil porque es su fiel compañero. Lo prenden apenas se despiertan, lo llevan a la oficina o universidad y, en las noches, lo ponen sobre sus piernas mientras revisan los últimos correos del día, charlan por Facebook y ven una película. Este momento también suele venir acompañado por un gran calor que proviene de la base del portátil, algo que algunos ven como un simple inconveniente pero que en realidad puede ser nocivo para la salud.
Según un estudio (inglés) de la publicación médica estadounidense Pediatrics, el uso prolongado de computadores portátiles calientes sobre la piel puede causar daños desde leves hasta muy severos.
El estudio es el resultado de la investigación de los doctores Andreas Arnold y Peter Itin, del Hospital Universitario de Basilea, en Suiza. Los científicos analizaron 10 casos de erythema ab igne o ‘el síndrome de la piel tostada’, una condición que fue documentada en publicaciones médicas por primera vez hace apenas 6 años. Aquellos que la padecen muestran despigmentación en piel que ha sido expuesta a altas temperaturas por varias horas.
La enfermedad se da cuando una persona absorbe demasiada radiación infrarroja, la cual se manifiesta por medio del calor. Según el estudio, los ventiladores, disipadores, baterías y unidades ópticas (CD-ROM o DVD-ROM, por ejemplo) que se encuentran en computadores portátiles pueden generar suficiente calor para causar la decoloración por un periodo de meses o incluso años. En los casos más extremos, la persona puede llegar a desarrollar cáncer de piel.
Esta condición también es conocida como ‘manchas de fuego’ y tradicionalmente se ha relacionado con trabajos como la joyería o la panadería, disciplinas que exponen a sus profesionales a altas temperaturas por períodos de tiempo prolongados.
Para evitar sufrir las consecuencias de un ‘laptop’ recalentado, existe una solución sencilla pero que debe ser empleada con inteligencia. Naturalmente, lo que debe hacer el usuario es usar su computador sobre un escritorio, pero como la gente prefiere la comodidad de su sofá o su cama, o debe trabajar en aeropuertos y otros sitios públicos sin un soporte adecuado, otra opción es poner una barrera de algún tipo entre el cuerpo y el portátil.
En este último caso, es importante recordar que lo que separa la piel del portátil no debe ser una tela, cobija, colchón, almohada o toalla, pues sus fibras se meten al portátil y terminan empeorando el problema del calor. Muchos ventiladores incluso dejan de funcionar porque ya no pueden girar a causa de la cantidad de pelusa que se encuentra enredada en su hélice.
En almacenes especializados se ofrecen accesorios que consisten en una plástica con ventiladores, que separa el portátil de las piernas y a la vez ayudan a que el equipo se caliente menos de lo habitual.