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Envase a base de Maíz, mata las bacterias y prolonga la frescura de los alimentos.
El tema del desperdicio de comida vuelve como un boomerang, especialmente durante el período de Navidad y Año Nuevo, cuando compramos y preparamos demasiada comida, que luego termina en grandes cantidades en los vertederos de basura.
Sin embargo, no es solo un recordatorio de que el mundo tiene hambre y desperdiciamos mucha comida porque compramos más de lo que podemos comer, sino también algo de ayuda para resolver este problema.
Y estamos hablando de un nuevo tipo de envase de origen vegetal, que permite alargar la frescura de los productos alimenticios, y además es biodegradable.
Toma la forma de una película transparente de científicos de la Universidad de Harvard y la Universidad Tecnológica de Nanyang (NTU) de Singapur.
Su ingrediente principal es el maíz, que ha batido récords de popularidad en el uso no alimentario en los últimos años. sobre el combustible de maíz, las botellas de bebidas probadas por Pepsi que lo contienen y su uso en la industria del papel.
El maíz es la base de un envase inteligente que mata bacterias y hongos.
Material a base de fibras que consta de proteína de maíz comestible: zeína (el llamado gluten de maíz, insípido e inodoro, que se utiliza a menudo para revestir vasos de papel para bebidas, frutas, tabletas y confitería), así como almidón, celulosa y otros polímeros naturales. se forma en un proceso llamado electrohilado. Es durante este proceso que las fibras se enriquecen con ingredientes antibacterianos, como el tomillo, el ácido cítrico y el ácido acético.
Cuando la película se usa para envolver alimentos como carne, pescado u otros productos frescos, los ingredientes antibacterianos permanecen en las fibras. Sin embargo, comienzan a liberarse automáticamente a medida que aumenta la humedad o las enzimas específicas producidas por bacterias dañinas , matándolas, junto con cualquier hongo que pueda aparecer, evitando que los alimentos se echen a perder.
Durante las pruebas, los científicos utilizaron fresas frescas que, cuando se almacenaron en una nueva lámina, duraron una semana entera antes de que apareciera moho, es decir, 3 días más que en los envases clásicos.
Además, el nuevo envase no contribuye a la producción de residuos, ya que es biodegradable y utiliza zeína, que es un subproducto de la producción de etanol, por lo que no requiere un cultivo separado de maíz.
Entonces, ¿cuándo llegarán los nuevos envases a las tiendas? Los científicos esperan que su material se comercialice en los próximos años.
El envasado de alimentos activos sostenibles y biodegradables con tecnología incorporada para matar bacterias y hongos es de gran importancia para la industria alimentaria. Puede servir como una alternativa ecológica a los polímeros a base de petróleo que se utilizan en los envases de alimentos comerciales, como el plástico, que tiene un impacto medioambiental negativo significativo
prof. Mary Chan de NTU
